El viaje a Bizancio

El viaje a Bizancio es, cronológicamente, el segundo libro de poemas de Luis Antonio de Villena, que concluyó en 1974. Se trata de un libro en que, bajo la égida del lenguaje, se aúnan dos intentos: el inicio de una poesía experiencial, que no renuncia al bagaje estético, y otra poesía de las sensaciones —normalmente localizable en los poemas de prosa—, que se manifiesta en términos de sensualidad barroca. Pero una y otra manera son —y eso les une— el viaje a un mito: la ciudad donde no existe la vejez; el reino prohibido de la juventud sin tiempo. No idea de sueño, sino sueño expresado en datos de virtual dimen sión «física», en ofrecimientos «sensibles», a los que no es ajena la propia especie del lenguaje. Una inquietante ciudad, asediada a me- nudo, cuya realidad es el cuerpo. El cuer- po en juventud, o el lujo plástico de la palabra. Si el cuerpo muere, su belleza le sobrevive. De alguna manera, esta última expresión sintetiza el sentido del libro de Luis Antonio de Villena.